Para mis suprapacientes conejillos de indias, que siguen dejándose «acometer» mis apaños épicos sin rechistar demasiado 😊
No debería admitir esto (que le quita contundencia a mi lisonja para los arriba mencionados), pero preparar este hermoso platico de zalameros keto-blinis de aguacate y trucha (en sus dos variedades) me ha supuesto un total de 16 minutos. Cronometrados. Y quedan… celestiales.
De veras. La base de no-pan (a diferencia del recurrente pan de molde industrial) es una delicia jugosa y sabrosa (que se hace en 10 minutos). ¡Tenéis la receta en los imperdibles blinis low carb de aguacate! Y aunque sospecho que quedaría de lujo con casi cualquier cosa que se os ocurra, lo cierto es que con trucha ahumada y huevas… su exquisitez roza lo indecible.
Y son tan sencillos… Una vez tengáis vuestro botín de blinis, solo tenéis que apañar un poco de «aguacate untable» (chafando el medio aguacate que os ha sobrado de los blinis y aliñándolo con un chorrillo de zumo de limón y sal al gusto) y embadurnar generosamente.
Si también os apetece poder decir eso de «os quiero mucho… como la trucha al trucho», coronad los blinis aguacateados con un poquiño de trucha ahumada, huevas de trucha (idealmente, que no sean bolitas de gelatina y azúcar que un día olieron un poco de océano, ¡que un día es un día!) y una hojita de eneldo.
Os aseguro que quien los pruebe no podrá evitar quereros mucho también 😀