Modo noche

Canutillos de chocolate (trampa para granujas)

¿Conoces a algún súper-granuja de esos que te atraen con su irresistible carisma, te embaucan con su enorme sonrisa y te dejan por los suelos (o te comen)? 😅 Pues estos canutillos son la trampa perfecta para detectarlos, porque no podrán resistir la tentación de catar uno disimuladamente.

canutillos de chocolate 100 con nata keto sin azucar low carb
Por muy carismática que sea su sonrisa, le resultará imposible disimular que falta un canutillo.

Aunque seguro que no cuentan con que la frambuesa en polvo ejerza de chivata y desmorone sus excusas. Así que si invitas a algún sospechoso de granuja, puedes probar a embaucarlo a ver si pica.

Para unos 4-6 canutillos caza-granujas, según el moldecito que tengas o cuán gruesos los hagas, solo necesitas:

  • Unos 50g de chocolate bien negro (el mío es 100%)
  • Nata para montar (con apenas 100ml bastará)
  • Pelín de edulcorante opcional
  • Frambuesa en polvo para identificar al granuja
  • Papel de acetato resistente al calor (para que quede brillantito cuando lo desmoldes) recortado en rectángulos del tamaño del que vayas a querer los canutillos finales y unos moldecitos cilíndricos (unos cortadores de mini-galletas servirán, son solo para sujetar el plástico a modo de servilletero)

Empieza por derretir el chocolate (al baño maría o en tandas de pocos segundos en el micro), remuévelo bien para que temple.

Coge esos rectángulos de acetato y ten bien a mano los moldecitos-servilletero. Ahora llega el ansiado momento de mancharte las manos. Con una brocha, pinta el rectángulo con chocolate, asegurándote de que queda una capa generosa o el canutillo se romperá. Deja una parte sin pintar para poder enrollar el plástico alegremente. 

Haz un rulillo, dejando el chocolate dentro y mirando que no queden agujeros sin pintar y coloca el tubito chocolateado dentro de su moldecito-servilletero. Déjalo que se enfríe bien antes de intentar liberar tu canutillo o se romperá. Idealmente, que pase un buen rato en la nevera y que lo manipulen unas manos frías.

Y ya podrás disfrutar del feliz momento de sacarlos con cuidado y mucho amor de su servilletero y desenrollar el plástico de acetato que envuelve vuestros canutillos. Es inevitable que alguno se rompa o tenga un huequecito, lo cual es una bendición porque así lo podéis usar para comprobar que está bueno, que en la cocina y en la repostería «hay que probarlo todo». ¡Y ya casi estás!

No quedará más que batir enérgicamente esa nata para montar bien fría, edulcorarla un poquito (o no), meterla en una manga pastelera (o tampoco) y rellenar esos bellos canutillos.

Si también quieres atrapar algún granuja, espolvorea un poquitito de frambuesa en polvo (como esta de aquí) sobre los canutillos rellenos. Y trampa para granujas lista. No podrán resistirse. Eso sí… si el granuja es de los «muy, muy listos», cabe la posibilidad de que no pique (o de que te dé absolutamente igual que sea un granuja o no).

Si te decides a regalarte un caprichillo, no dejes de curiosear mis e-books de keto-dulces, que puedes descargarte gratis a cambio de buen karma o también comprar en Amazon, para contribuir a la causa.

 

¡Ojalá te deleiten tanto como a mí! 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Inesuka

Inesuka

Nutricionista, psicóloga y keto coach apasionada (además de feliz superviviente de cáncer, domadora de lupus, insulinorresistente con síndrome de ovario poliquístico y ex-gorda-depresiva-polimedicada).

Podría interesarte

Este contenido está protegido por copyright. Por favor, para hacer uso de él, contacta con nosotros.