Si hay una hortaliza que merece ser distinguida con la medalla a la utilidad paleo-low-carbista, es la humilde y socorrida coliflor. Tanto nos apaña un reconfortante cuscús o una tortilla de no-patatas, como hace las veces de puré low carb.
Y a los dubitativos os diré que sí, que la idea es apta para paladares poco amantes de las coles. No tiene la misma textura que el puré tradicional de patata, pero tampoco se aleja demasiado y apenas se aprecia el saborcillo a crucífera (en especial si le echáis un toquecillo de pimienta y un buen cacho de mantequilla bien grasienta) 😋
Hacerlo no tiene más misterio que el de cocer la coliflor (y/o brócoli, a mí me gusta mezclarlos que queda más bonico y sabrosón), triturar, echar un poco de mantequilla, queso crema o aceite y salpimentar al gusto. Y si estáis de buenas, con un toque de puerro queda de lujo y aún disimula más el sabor a coliflor.
Yo recurro a él con frecuencia para acompañar carnes y pescados (y para sustituir el puré de patatas en general) con un toque de aceite de oliva y pimentón dulce. ¡Y os aseguro que no lo echo de menos «ni miajita»!
Hola, se ve delicioso, como agregas el puerro?
Mil gracias 😘
Síiii!!! Pues según si estoy más o menos vaga se lo echo sofritito o simplemente lo cuezo con la coliflor antes de triturar. Con el puerro fritito el puré queda más sabroso, pero implica un cacharro más por limpiar 😊
Que tengas feliz día!!!